Aquí comienzan los apuntes en referencia a la lectura de Pájinas Libres, de Manuel González Prada. Libro a modo de antología que reúne algunos discursos y conferencias públicas. Si se preguntan por qué el uso de la "J" en la palabra pájinas es por el intento de transmitir la rebeldía y renuencia del autor hacia ciertas reglas en el idioma, inclusive dentro del libro el autor utiliza la "I" en lugar de usar la conjunción "Y", afianzando su rebelde pocisión.
A continuación, un fragmento del discurso de Manuel González Prada en el Ateneo de Lima a propósito de la imitación.
"...No solo hay el genio que inventa y el ingenio que rejuvenece y explota lo inventado; abunda la mediocridad que remeda o copia. ¡Cuánta mala epopeya originaron la Iliada y la Odisea! ¡Cuánta mala tragedia las obras de Sófocles y Eurípides! ¡Cuánta mala canción las odas de Píndaro y Horacio! ¡Cuánta mala égloga las pastorales de Teócrito y Virgilio! Todo lo bueno, todo lo grande, todo lo bello, fue maleado, empequeñecido y afeado por imitadores incipientes."
Y más adelante añade:
"Imitar equivale a moverse y fatigarse en el vagón de un ferrocarril: nos imaginamos realizar mucho y no hacemos más que seguir el impulso del motor"
Luego hace una severa crítica hacia la literatura nacional acuñándola de imitadora:
"En literatura, como en todo, el Perú vivió siempre de la imitación. Ayer imitamos a Quintana, Espronceda, Zorrilla, Campoamor, Trueba, y hoy continuamos la serie de imitaciones con Heine y Bécquer en el verso, con Catalina y Selgas en la prosa. Como Bécquer escribió composiciones poéticas de cortísimo aliento, y Selgas artículos no muy largos en frases diminutas y algo bíblicas, va cundiendo en el Perú el gusto por las rimas de dos cuartetas asonantadas y la afición al articulillo erizado de antítesis, concetti y calembours, quiere decir, entramo en plena literatura frívola"
En mi humilde opinión la imitación es un pobre recurso de algunos autores, pero también debemos entender que no hay obra completamente original, los estilos y corrientes son inevitables, y acaso el nacimiento de una nuevo estilo responde a diversos factores que aún en las culturas más ricas es difícil de propiciar. Algunas responden al azar o a una serie de confluencias difíciles de entender y vaticinar.
A mi parecer más importantes son las ideas y las acusaciones que realizan los autores en sus distintas manifestaciones que la búsqueda de un estilo propio, original, nuevo y decoroso. Pero vale escuchar las opiniones de nuestro genial ensayista quien nos muestra con su singular rebeldía, la mirada acusiosa que acaso no todos podemos notar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario